Pintor emilio petorutti

Pintor emilio petorutti gy ISABl_5S 17, 2011 11 pagcs Si hay un lugar en Buenos Aires al que disfruto ir es al Malba. Como todas las semanas, el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires tiene alguna que otra novedad para sorprendernos y ayudarnos a armar nuestra agenda de la semana próxima. Esta vez, de la mano de la curadora patricia Artundo llega el viernes 27 de mayo próximo una selección de 37 obras del pintor argentino nacido en La Plata, Emilio Pettoruti. Pero antes, para poder adentrarnos de lleno en su arte nos tenemos que responder: ¿Quién fue?

E-ste maestro estudió en la scuela de Bellas Artes de Buenos Aires para luego instalarse en Italia para trabajar en su arte. Esta influencia fue fundamental en su obra. Tras recorrer Europa rescatando rofesores técnicas decide retornar a la Argentin ori 1 lo solicita como su di t S»ipe to View nut*ge Paris. Ahora sí, el Malba re abstracto» el periodo Ilas Artes de La Plata a Francia fallece en ttoruti y el arte ue engloba la mayor parte de la historia que ya sabemos y que lo define como pintor. Estas piezas recorren collages, óleos y acuarelas e invitan a reflexionar.

Partiendo del

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paso del tiempo, mirar desde otra ?ptica obras que pudieron adquirir otro significado. Todo está en el ojo que se lo mire me dijeron alguna vez. El motivo de la exposición radica en los 40 años del fallecimiento de Pettoruti. También, como yapa, el Malba editó un catálogo denominado » Swipe to vlew next page «Otros papeles de trabajo. Pettoruti y el arte abstracto». 120 páginas más sobre el trabajo del argentino. Y si te interesó todo lo que te conté, tampoco te podés perder pispear «Emilio pettoruti y la búsqueda de la estratega propia», un texto que jamás ha visto la luz hasta este momento.

Como ya les dije, se inaugura el 26 de mayo y las visitas comienzan el 27 y hasta el 27 de junio. Un mes estimados, suficiente tiempo para pegarse una vuelta. HOMENAJE AL GRAN ARTISTA PLASTICO ARGENTINO, EMILIO PETORUTTI Emilio Pettoruti nació el 1 de octubre de 1892; en la ciudad de La plata – murió el 16 de octubre de 1971; en la ciudad de Paris *Por Diego Carbone :Emilio Pettoruti fue desde pequeño alentado por su abuelo en dibujo y la pintura. Estudió en Bellas Artes de Buenos Aires, con maestros como Atilio Boveri y Emilio Courtaret,con quien aprendió la perspectiva.

En el año 1911 articipó en una exposición de caricaturas, gracias con un dibujo que representaba al entonces diputado Rodolfo Sarrat. En el año 1913 se embarca, becado para estudiar, hacia Europa. Se instaló en Florencia , su intención era la de copiar el estilo del arte clásico, pero su destino fue completamente diferente. En la librería de Ferrante Gonelli, que adheria a los futuristas, adquiere un ejemplar de la revista «L acerba», perteneciente al Movimiento Futurista el cual pretende el progreso a través de la utilización de la máquina,.

En una exposición del grupo tuvo acceso a uManifiesto de 1909, desarrollado por Marinetti. Pettoruti conoce a los del grupo tuvo acceso a suManifiesto de 1909, desarrollado por Marinetti. Pettoruti conoce a los exponentes futuristas gracias a Gonelll. Este es el prmer movimiento que transforma tanto, su vida como su obra, al punto tal de participar en una exposición en el año 1914, llamada ‘Primera Exposición Invernal de Toscana», presentado cuatro obras, dos de las cuales se titulaban «Armonia- Movimiento Espacio» de diseño abstracto, aquí presenta los conceptos de los futuristas representando el movimiento en forma abstracta.

Esta etapa concluyó cuando Pettoruti conoce el Cubismo. En estos años también experimento con el collage técnica utilizada por los vanguardistas como los Cubistas para la realización de sus obras. El Futurismo ya no cumplía con las expectativas de Pettoruti, la pintura debía ser «construcción y color’ y el Cubismo cumplía estos requisitos, permitiéndole pintar los objetos que el amaba, como sifones, instrumentos musicales, soles, botellas, y fruteras.

Entre 1916 y 1917 reside en Roma, allí su concepción cambia nuevamente, luego de la «Primera Guerra Mundial» se dio n Europa un retorno a lo clásico en contraposición a los «movimientos de vanguardia». pettoruti adhirió a esta concepción. De esa época son sus obras «Mujer en el café» (1917) y «El filósofo» (1918). En 1916 conoce a Xul Solar con el cual, con el paso de los años,serian los pioneros en la ‘Vanguardia argentina». Ese mismo año expone en la Galería Gonelli, por primera vez en forma individual.

En los años subsiguientes expuso en Milán y Roma (1 92 Gonelli, por primera vez en forma individual. En los años subsiguientes expuso en Milán y Roma (1922)y en Alemania (1923). En 1924 viaja a París donde conoce al cubista, Juan Gris. Junto aXul Solar regresan a la Argentina. En el mes de octubre, expone en la Galería Witcomb,en forma individual, generando un escándalo, por un lado, sus detractores, acostumbrados a la pintura costumbrista, naturalista que se desarrollaba en el país en ese momento consideraron a las obras como «Una grave ofensa inferida a la dignidad del país».

En cambio los progresistas consideraban a Pettoruti como lo nuevo. El pintor permaneció en el país hasta 1952. 22 años antes en 1930 se le ofreció el cargo de director del Museo de Bellas Artes de La plata, y petorutti se propuso profesionalizar el Museo, aumentando su patrimonio pictórico, comprando obras de artistas como Xul Solar. Petorutti, continuo pintando y realizó series de pinturas como sus soles, arlequines y copas, de características menos abstractas, teñido de características del retorno al orden, siendo obras más claras y geometricas.

En 1952 se instaló nuevamente en Europa realizando exposiciones a lo largo del continente, volviendo a la abstracción con temas como, las noches de verano, el crepúsculo marino, oles ovalados, en palabras de Roger Bissiere el artista aspira a «la certidumbre, el orden, la pureza, la espiritualidad». En 1970 habia tomado la decisición de retornar a su Argentina, pero fallece sin poder lograrlo el 16 de octubre del año siguiente. EMILIO PETORUTTI, EL ARTI fallece sin poder lograrlo el 16 de octubre del año siguiente. EMILIO PETORUTTI, EL ARTISTA.

EL HOMBRE, UN INMORTAL POR DERECHO PROPIO…!!! Una lectura polémica En las obras a las que le dio relevancia como en sus escritos, Pettoruti construyó su imagen de artista cubo-futurista. Los curadores lo ponen en discusión. Mercedes Pérez Bergliaffa Ahora las formas juegan, se superponen y transparentan. Ahora los motivos (una mesa situada en un interior, una copa) son sólo excusas para pintar, y no aspraciones. Aquí, en este segundo piso del Malba -una sala mediana y amarilla— se reúnen la Dinámica del viento, la Cittàpasee, Le ombre (La sombra), y varios paisajes.

Es en estas obras, dentro de este espacio, cuando uno siente que la búsqueda de la luz estructura, define los movimientos que nos rodean y que son expulsados desde las pinturas. Porque los cuadros exponen dinámicas, líneas de fuerza; uestran las posibilidades que brinda la investigación plástica en torno a la forma y al valor, la excitación del pintor ante el descubrimiento de las estructuras puras y su alegría. Y hay que decirlo: contemplar estas obras genera asombro.

Porque, sí, se trata de Pettoruti, el gran artista que todos conocemos; pero ninguno de estos trabajos es el que uno esperaba encontrar. Entonces, al entrar en la exhibición, caen los presupuestos y una ola fresca, original, inunda la vista, el cuerpo y la percepción. Devora la mirada. Se trata de Pettoruti y el arte abstracto, 1914-1939, la muestra que se realiza en el Malbaactualmente Pettoruti y el arte abstracto, 1914-1939, la muestra que se realiza en el Malbaactualmente y que tiene como objetivo comunicar una visión distinta, renovada, de la obra del artista. ?Encargados del asunto? La curadora patricia Artundo y su colega Marcelo Pacheco, curador en jefe del museo. «‘Ya hacía varios años que estábamos tras este proyecto», comenta Pacheco, «que trata sobre el Pettoruti menos conocido. Y en realidad, existe muy poca obra suya de este tipo y, además, mucha de esa producción quedó en Europa, como por ejemplo, en la colección Sartoris, que fue una de las más famosas de la egión durante el siglo pasado (aunque luego los descendientes de Sartoris se deshicieron de los Pettorutis). asó que cuando el artista vivía allá, había regalado o vendldo estas obras. Pero fue a partir de los 70 —el momento en que volvieron a circular- cuando estos trabajos aparecieron en remates internacionales, como obras sueltas. » «La exposición plantea un reencuentro con Pettoruti», explica por su parte Artundo, «del que proponemos verlo desde otro lugar, no tan sólo relacionándolo con el cubismo o el futurismo, como en general se hace, sino sobre todo con la abstracción.

Para eso trajimos a sta exhibición muchas obras que hace tiempo que no se ven en la Argentina -como por ejemplo Espanzione-violenta (Expansón- violencia)- que estaba en Italia y que pertenece a una colección privada. » pero este conjunto más bien pequeño de obras -sólo treinta y siete- no se exhiben por conmemoración, renacimiento o recuerdo, sino que todo el tra o recuerdo, sino que todo el trabajo curatorial está basado en una hipótesis.

Dice de ella el curador del Malba: «Lo que nos interesa postular es que Pettoruti se construyó como artista vanguardista a partir de su imagen como pintor cubista de tipo picassiano. De hecho, los textos que se han escrito sobre él o los que él mismo escribía en los que se encargó muy bien de dejar un testimonio claro especialmente en su autobiograffa que es tendenciosa y que hay que leer con cuidado-, insisten sobre este punto.

Esta fue una decisión del propio Pettoruti sobre cómo él decidió mostrarse. Tenía esto muy definido; por eso, la obra que se puede ver ahora en el museo no fue nunca mostrada por el artista durante los años 30 y 40, salvo en el año 24, cuando hizo esa famosa exposición-escéndalo»_ Pacheco se refiere a la muestra que Pettoruti realizó en la galería Witcomb de Buenos Aires, en la que expuso ochenta y seis obras que provocaron reacciones extremas: la leyenda dice que el público las escupía. Luego de esa muestra en nuestro país pasaron a identificar a Pettoruti como un artista cubista o futurista; y él, en ese momento, sacó provecho de la situación porque se había dado cuenta de que Picasso era el lider artístico a nivel mundial. por lo que ese encasillamiento, a Pettoruti, como diseñador de su carrera de artista, le convenía», detalla Pacheco. «En este sentido era, también, un estratega. Tal como lo comenta el curador, la obra del pintor no termina en sólo dos m 1 también, un estratega. Tal como lo comenta el curador, la obra del pintor no termina en sólo dos movimientos artísticos: abarca mucho más. Lo que ella comprende, cómo y desde dónde, es lo que esta muestra propone analizar, estableciendo como marco de fondo, abarcativo, a la abstracción. Porque Pettoruti, antes de diseñar su carrera y de encasillarla a conveniencia, se definió en los últimos quince años de vida como «pintor abstracto», retomando un hilo que había dejado atrás hacia mucho tiempo, on sus dibujos y pinturas abstractos de los años italianos (1913-1924). omingo 5/6/201 1 emilio pettoruti (1892-1971) Cuestiones abstractas El Malba presenta «Pettoruti y el arte abstracto», una selección de obras realizadas por el artista argentino durante la primera mitad del siglo XX, que se propone repensar la relación de Pettoruti con el arte abstracto. Se exhiben collages, óleos y acuarelas realizados entre 1914 y 1 949, período que abarca sus primeros años en Italia, su regreso a la Argentina y sus posteriores viajes por Europa antes de instalarse definitivamente en París. por Laura Isola 5/06/11 -01 Angolo d? n giardino o El jardín (1917) y Città-paese (1914) Torcer la manera de mirar algunos de los óleos, acuarelas y collages de Emilio Pettoruti, sobre todo, del período que va desde 1914 a 1949, es la premisa que sostiene y encanta de la muestra Pettoruti y el arte abstracto, curada por Patricia Artundo en el Malba. Lo que propone la historiadora es arrancar algunas obras de este pintor nacido en La Pla que propone la historiadora es arrancar algunas obras de este pintor nacido en La Plata en 1892, asociado siempre a la vanguardia histórica, y establecer el reencuentro con la bstracción.

De esa manera, Artundo parece estar suturando una parte con otra. Si Pettoruti fue escasamente pensado en su lugar central en el desarrollo de la vanguardia en América latina, si la vanguardia Madí no se siente en nada relacionada con este artista, es menos por el gesto fundacional que toda vanguardia que se precie debe de tener que por las cualidades abstractas de este artista. A su vez, el mismo artista construyó una doble filiación que fue rubricada en la década del 60 por la lectura del crítico Policho Córdova Iturburu, colaborador de la revista Martín Fierro.

Luego de los años 50, era presentado como pintor abstracto en varias muestras europeas que se sumaba a su relación sui generis con el futurismo o el cubismo. De manera singular se emparentó con estos movimientos sin acatar el precepto de que había que «matar a los padres». Muy por el contrario, el joven Pettoruti que fue a Europa en 1913, asistió a la Primera Guerra Mundial y al comienzo del siglo, tal como periodizan desde Walter Benjamin hasta Eric Hosbawm, se dedicó a los grandes maestros del arte, como el Beato Angélico, no para copiarlo sino para investigarlo.

En Giotto, Masaccio, en los venecianos y el arte etrusco, entre tantos, Pettoruti buscaba esa misteriosa virtud que se mantiene a lo largo de los siglos en las obras de arte, cuando los temas ya no importan y sólo quedan mantiene a lo largo de los siglos en las obras de arte, cuando los temas ya no importan y sólo quedan las formas. Al tiempo que vivía en la paradoja de la Europa en guerra: máxima destrucción junto a la máxima creación que es el aporte de las vanguardias históricas, pero no sólo allí.

El listado de autores, obras y descubrimientos es enorme y se extiende a todas las artes y emás disciplinas del conocimiento. En el caso de Pettoruti, si con el futurismo encontró la liberación y experimentó con el paisaje, con la luz y el color, también se «liberó» del movimiento en pos de un estilo personal. En 1 927, los motivos aparecen para quedarse en su línea de trabajo: la copa, los arlequines músicos y la mesa de taller.

Y son esos, no temas ni figuras sino motivos que, como en esos años juveniles, los atrapan para investigarlos. Es justo mencionar que el operativo de recolocación de Pettoruti ya tiene unos capítulos anteriores: las muestras de Arte abstracto rgentino (2002-2003) y yente/prati (2009), con IOS escritos de Adriana Lauría y Marcelo Pacheco, principalmente, tienden los puentes con la obra de Emilio Pettoruti y la hacen funcionar como antecedente del arte abstracto argentino.

Algunas veces, las muestras sirven para reescribir la historia del arte. Cuando eso ocurre, no solamente se disfruta desde el gusto, ese concepto tantas veces definido desde platón a Bourdieu, pasando por Kant, que fue de lo individual a lo social y adquirió estatuto de proposición universal con este último. Cuando eso sucede, se le suma el placer i