Capítulo Tres

Capitulo Tres: LUGAR HECHO POR EL HOMBRE 1. El fenómeno del lugar hecho por el hombre. Habitar entre el cielo y la tierra quiere decir «asentarse» en un «multifacético en-medio», esto es, concretizar la situación general como un lugar hecho por el hombre. Aquí la palabra «asentarse» no significa una mera relación económica, antes bien es un concepto que denota la habilidad para simbolizar significados. Cuando el «environment» hecho por el hombre es significativo, el hombre se encuentra «en casa».

Los lugares donde hemos crecido son tales «casas»; sabemos exactamente como se siente el caminar en una determinada ipe next pase superficie, el estar en 2 un techo particular; s em sureña y el confortab calor En general, conocem existencia. idos, o el estar bajo fresco de la casa n consigo nuestra Pero «asentarse» va más allá de tales satisfacciones inmediatas. Desde el comienzo del tiempo el hombre ha reconocido que crear un lugar quiere decir expresar la esencia del ser.

El «environment» hecho por el hombre, donde él vive, no es simplemente una herramienta útil o el resultado de aconteceres for tuitos; tiene estructura e incorpora significados. Estos significados y estructuras son reflejo de la comprensión que l hombre tiene del «environment»

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natural y, en general de su situación existencial. Por tanto el estudio del lugar hecho por el hombre debe tener una base natural : debe tomar la relación con el «environment» natural como su punto de partida.

La historia de la arquitectura muestra que las primeras hombre con todo fueron muy familiares y determinaron su relación con las construcciones y objetos. Al igual que los elementos naturales a éstos se les infundió vida, tenian maná , o poderes mágicos. Los poderes endiablados fueron conquistados al darles «alojamiento». De esta manera se asentaron en un lugar y pudieron ser nfluenciados por el hombre. La arquitectura de las primeras civilizaciones, de este modo, puede ser interpretada como una concretización de la comprensión de la naturaleza, descrita antes en términos de cosa, orden, carácter, luz y tiempo.

Los procesos involucrados en «traducir’ estos significados a formas hechas por el hombre ya han sido definidas como «visualización», «complementación» y «simbolización», mientras que «agrupación» sirve un propósito un tanto diferente, el convertir el lugar hecho por el hombre en un microcosmos . En términos generales podemos afirmar que el hombre «edifica» u mundo. La primera manera de edificar depende de la concretización de las fuerzas naturales. En la historia temprana del arte y la arquitectura occidental encontramos dos maneras básicas de lograr ésto.

Ya sea que las fuerzas se expresan «directamente» por medio de lineas y adornos o se concretizan como cosas hechas por el hombre que representan las cosas naturales mencionadas antes. Mientras que la primera manera fue usada por la gente nórdica, la segunda fue desarrollada por las civilizaciones del Mediterraneo. Concentraremos nuestra atención en la manera «mediterranea». La temprana arquitectura mediterránea se distingue ante todo por el uso de grandes piedras .

Es una arquitectura megalítica donde el material simboliza la solidez y permanencia de las montañas y las rocas. 32 arquitectura megalítica donde el material simboliza la solidez y permanencia de las montañas y las rocas. La permanencia fue entendida como una necesidad existencial prioritaria, y se relacionó con la habilidad del hombre de procrear. La roca erguida, menhir, fue simultáneamente una roca «construida» y un símbolo fálico; y los muros ciclópeos masivos incorporaron las mismas fuerzas.

A través de un proceso de abstracción, las fuerzas elementales se transformaron en un sistema de verticales y horizontales (elementos «activos» y «pasivos»), desarrollo que culminó en las estructuras ortogonales de la arquitectura egipcia. Otros significados naturales también fueron relacionados con este sistema. Las pirámides egipcias son «montañas artificiales» que se construyeron para evidenciar las propiedades de una montaña real, tales como el eje vertical deducido que conecta la tierra y el cielo y «recibe» el sol.

La pirámide unifica la montaña primaria de la mitología egipcia on el dios-sol Ra, y representa al rey como su hijo. Al mismo tiempo, a través de su localización entre el oasis y el desierto (vida y muerte), las pirámides visualizan la estructura espacial del país; un valle fértil longitudinal comprendido entre extensiones inmensas de tierra estéril. Aqui los edificios se utilizan para definir un «mite significativo («borde»). or último podemos mencionar que los egipcios «construyeron» el cielo, decorando con estrellas y fondos azules los cielos rasos de tumbas, templos y casas. Por medio de la visualización y la simbolización los antiguos gipcios pudieron concretizar su mundo conocido. Ya se ha mencionado la «caverna» como otro elemento natural arquetipo. En la arquitectur mencionado la «caverna» como otro elemento natural arquetipo. En la arquitectura megalítica se construyeron cavernas artificiales, dolmen, para visualizar este aspecto de la tierra.

Al ser simultáneamente espacios interiores y símbolos femeninos, las cavernas artificiales se entendieron como representaciones del mundo como un todo, interpretación que se completó con la introducción de elementos verticales «masculinos», como el pilar o un sistema ortogonal de miembros horizontales y verticales. El «matrimonio de cielo y tierra» que fué el punto de partida para las antiguas cosmogonías se concretizó en formas construidas. Ejemplos típicos se encuentran en los templos megalíticos de Malta, donde los ápsides un menhir y los límites estaban articulados de manera ortogonal.

En la arquitectura antigua también encontramos otras representaciones de los elementos naturales. Los templos jónicos con sus numerosas columnas se han descrito como una «arboleda sagrada» y la expresión de ‘bosque de columnas» se usó frecuentemente para indicar las salas hipóstilas de las primeras civilizaciones. En los templos egipcios las columnas salen de las formas vegetales, como la palma, el papiro y el loto. El bosque de columnas egipcio representaba «la tierra y las plantas sagradas que se levantan del suelo fértil para traer protección, permanencia y sustento a la tierra y a su gente».

En general, la comprensión del hombre acerca del suelo fértil se visualiza a través de la agricultura. En el «landscape» cultural las fuerzan naturales son «domesticadas» y la realidad viviente se manifiesta como un proceso ordenado donde el hombre participa Por tanto el jardín es un lugar donde la naturaleza viva se concr 32 ordenado donde el hombre participa. por tanto el jardín es un lugar donde la naturaleza viva se concretiza como una totalidad orgánica. De hecho la imagen que el hombre ha tenido sobre el Paraíso siempre ha sido la de un jardín delimitado.

En el jardín se reúnen los elementos conocidos de la naturaleza; árboles frutales, flores y aguas «domadas» En la pintura mediterránea se representa como un hortus comclusus con el «Árbol de la Vida» y la fuente en el medio, rodeados por una «soledad» de montañas y bosques. Aún el agua puede ser «construida» dándole una definición precisa omo parte de un «landscape» cultural o visualizándola en una fuente. En el «landscape» cultural el hombre «construye» la tierra y hace evidente la estructura potencial como una totalidad significativa.

Un «landscape» cultural se basa en la «cultivación» e incluye lugares, senderos y dominios definidos que concretizan la comprensión por parte del hombre del «environment’ natural. El espacio ortogonal, los interiores a la manera de cavernas, y los «landscapes» culturales sugieren órdenes generales más amplios que, hasta cierto punto, satisfacen las necesidades del hombre or la comprensión de la naturaleza como un todo estructurado, que incluye todos los niveles del «environment» desde el objeto hasta la reglón.

No obstante, la búsqueda de orden se manifiesta a través de la «construcción» de uno de los órdenes cósmicosmencionados en conexión con el lugar natural. Inmediatamente se entiende que el espacio ortogonal de los egipcios incluye este aspecto, al unificar la dirección este-oeste del sol yla dirección sur-norte del Nilo. Más aún, los egipcios una y otra vez reprodujeron su imagen general de cielo y s 2 del Nilo. general de cielo y tierra en los pisos, paredes y cielo rasos de sus emplos.

Tenemos motivos para creer que los cuatro postes virtuales en los que descansa el cielo se derivan de un edificio arquetipo con un techo plano y una columna en cada esquina. Por tanto la comprensión del «environment» natural no necesariamente antecede la construcción. El mismo acto de construir se convierte en un medio para esta comprensión y la casa puede actuar como un «modelo» para la imagen cósmica si al menos está presente una similaridad estructural. Así nos damos cuenta de la importancia fundamental de la arquitectura como medio para dar al hombre un posicionamiento existencial.

La Imagen nórdica del cosmos como una casa donde el eje celestial forma el caballete-viga que descansa sobre dos postes, siendo el del norte el Irminsut, es también una proyección de la estructura de una casa arquetipo sencilla, a la esfera cósmica. La Imagen mediterránea de una «caverna cósmica» obviamente se deriva tanto de las cavernas naturales como de las artificiales como el panteón romano. En este caso encontramos una relación recíproca entre el lugar natural y el hecho por el hombre.

Los romanos poseyeron tanto la imagen de la caverna como de la imagen de la casa, nuevamente representando un encuentro de lementos mediterráneos y nórdicos. En el panteón dos ejes entrecruzados se integraron en la rotonda que semeja la caverna, así expresando simultáneamente que el mundo tiene dirección y a la vez es redondo. En el nivel urbano los romanos visualizaron el orden cósmico por medio de dos calles principales que se cruzan en ángulo recto, el cardo que 6 32 orden cósmico por medio de dos calles principales que se cruzan en ángulo recto, el cardo que va norte-sury el decumanus este- oeste.

Este esquema ha sido conocido por muchas civilizaciones y segura vivo en la Edad Media. La palabra «distrito» (en inglés «quarter») en relación con ciudades surge de esta división en cuatro partes generada por el cruce de los dos ejes. En la Edad Media países completos como Irlanda e Islandia se dividieron en cuatro partes. Un mapamundi del siglo 12 0 13 muestra cuatro continentes dispuestos simétricamente, separados por mares y rodeados por un «mare magnum».

En relación con esto podemos recordar que la basílica cristiana con transepto se organiza alrededor de un «cruce» Mientras que un orden cósmico se visualiza por medio de la organización espacial, el carácter se simboliza por medio de a articulación formal. El carácter es más intangible que las «cosas» naturales y que las relaciones espaciales, y requiere especial atención de parte del constructor. De hecho su concretización presupone un lenguaje de formas simbólicas (estilos). Tal lenguaje está hecho de elementos básicos que pueden variarse y combinarse de diferentes maneras.

En otras palabras el lenguaje depende de una articulación formal sistemática. El paso decisivo en el desarrollo de un lenguaje formal coherente fue tomado por los griegos. Ya hemos destacado como el logro de los griegos descansa en la efinición precisa de diferentes clases de lugares naturales que se relacionaron con los caracteres humanos básicos. Esta definición implicó algo más que la dedicación significativa de un lugar particular a un dios particular, aunque éste haya sido el primer paso. 7 32 Ante todo, tuvo que ver co particular a un dios particular, aunque éste haya sido el primer paso.

Ante todo, tuvo que ver con la construcción de estructuras simbólicas, templos, que dieron presencia al carácter pensado. El templo aislado puede entenderse como un miembro Individual de una «familia», al igual que los dioses formaron una familia, lo ue simboliza los varios roles e interacciones del hombre en la tierra. Las diferencias individuales dentro de la familia se expresaron por primera vez en los llamados Ordenes clásicos, pero también en las variaciones dentro de los Ordenes asi como en las combinaciones de rasgos de dos o más Ordenes.

Nuestro conocimiento teorético de los Ordenes nos lleva atrás al arquitecto romano Vitruvio. El sostenía que los templos debían construirse en estilos diferentes según su dedicación y procede a explicar los ordenes en términos de características humanas. La columna dórica «ofrece la proporción del cuerpo humano, su uerza y su belleza». La jónica está caracterizada por la «esbeltez femenina» mientras que la corintia «imita la ligera figura de las vírgenes». por tanto la articulación de la arquitectura griega no puede entenderse solamente en términos visuales o estéticos.

La articulación pretendía precisar un carácter particular, y este carácter, sencillo o complejo, determinaba cada parte del edificio. En la arquitectura del renacimiento la articulación se basó en la tradición de «Vitrubio» Serlio denomina los órdenes opera di mano, y da a entender que ellos representan diferentes maneras de existencia humana, ientras que la rusticación era opera di natura , esto es, un símbolo de las fuerzas naturales de la tierra. Ya en el siglo 18 los órdenes clásicos conformaron la 32 simbolo de las fuerzas naturales de la tierra.

Ya en el siglo 18 los órdenes clásicos conformaron la base para un tratamiento excepcionalmente sensitivo de la caracterización simbólica. No obstante, la historia de la arquitectura también conoce otros lenguajes simbólicos coherentes. En la arquitectura medieval europea, una sistemática aproximación a la forma arquitectónica Sirvió para simbolizar el rdenado cosmos cristiano. Como el mundo cristiano está basado en el espíritu como una realidad existencial, la articulación medioeval buscaba la «desmaterialización» y negaba los Ordenes clásicos antropomorfos.

La desmaterialización se entendía como una función de la luz , como una manifestación divina. Se puede decir entonces que el hombre medioeval «construyó» la luz, el más intangible de los fenómenos naturales. Desde entonces la luz ha sido un medio primario de la caracterización arquitectónica. Además de «fuerzas», orden, carácter y luz, las categorías de la omprensión natural también incluyen tiempo, que básicamente es una dimensión diferente. El tiempo no es un fenómeno sino el orden de una sucesión fenomenológica y de cambio.

Sin embargo, las construcciones y los asentamientos son estáticos, con excepción de algunos elementos móviles de importancia secundaria. No obstante, el hombre ha logrado «construir» el tiempo, al trasladar estructuras temporales básicas a propiedades particulares. Ante todo, vida es «movimiento» y como tal posee «dirección» y «ritmo». por tanto el sendero es un símbolo existencial fundamental que oncretiza la dimensión d Algunas veces el sendero I ignificativo, donde el un fin significativo, donde el movimiento se frena y el tiempo se convierte en permanencia.

Por ello otro símbolo básico que concretiza la dimensión temporal es el centro. Los edificios arquetipo que visualizaron el concepto de centro fueron el Mal -colina- y los encerramientos, que con frecuencia aparecen combinados. El Mal usado por las antiguas civilizaciones se entendió como un axis mundi. En la acrópolis, Mal (colina) y encerramiento (meseta) se unifican. En la arquitectura antigua también encontramos usualmente na via sacra que lleva al centro, y que es utilizada para rituales que re-crean eventos «cósmicos».

En la basílica cristiana, sendero (nave) y meta (altar) se unen para simbolizar el «Camino de la salvación» de la doctrina cristiana. Los fenómenos básicos del «environment» urbano, la calle y la plaza también pertenecen a la categoría de sendero y centro. El lugar hecho por el hombre visualiza, complementa y simboliza la comprensión del hombre acerca de su «environment». Además también puede recoger otros significados. Cualquier asentamiento real se fundamenta en el recoger y las orma básicas son la granja, el vilorio agrícola, el alojamiento urbano y el pueblo o ciudad.

Todos estos lugares esencialmente son hechos por el hombre o son «artificiales» pero caen en dos categorías muy diferentes. Las primeras dos formas básicas están directamente relacionadas con la tierra, esto es, forman parte de un «enwronment» particular y su estructura está determinada por este «environment» En las otras en cambio, la relación directa con el «environment» natural se ha debilitado o está casi perdida y el recoger se ha convertido en congregar formas que tienen sus raíces en o 0 DF 32